El calefon requiere de una mínima presión – 0,2 Bar de presión de agua- para encenderse y para mantenerse activo. Si abres más de una llave de agua simultáneamente, puede disminuir la presión del chorro. Este tipo de artefactos tienen una durabilidad promedio de 10 años y funcionan a gas. Existen los de tiro forzado o tiro natural. Los calefones de tiro forzado se usan en espacio con muy poca ventilación y poseen un extractor de aire para asegurar la correcta evacuación de gases. Por seguridad nosotros te recomendamos un calefont con tiro normal para prevenir cualquier accidente, ya que éste estará en contacto permanente con el ambiente y su correcta ventilación natural.
Gracias al desarrollo de nuevas tecnologías, ahora podemos disfrutar de algunos de encendido automático (electrónico), que nos permiten ahorrar hasta 4 litros de gas mensualmente; otros que encienden con chisperos propios (ionizados), o los más clásicos que se encienden con fuego.
El termo mantiene el agua caliente en forma permanente. Tiene un termostato eléctrico que enciende o apaga el calentador según sea necesario y funciona incluso con muy baja presión de agua. Además, el termo puede proveer agua caliente tanto para uso directo en tu ducha, tina y jacuzzi; o para calefacción central suministrada por agua.